Editorial Economía

Nuevo ataque a las instalaciones de Cuajone

La gran mina de cobre está paralizada desde el 28 de febrero

Nuevo ataque a las instalaciones de Cuajone
  • 27 de marzo del 2022

El día de ayer decenas de pobladores de la comunidad de Tumilaca, Pocata, Coscore y Tala realizaron una violenta incursión en la garita de control de Viña Blanca, en el ingreso a la Unidad Minera de Cuajone. Fue un ataque con piedras y fuego, y afortunadamente no se produjo ningún enfrentamiento con el personal de seguridad, por lo que no hubo heridos ni pérdidas personales que lamentar. Eso sí, los atacantes realizaron destrozos en la infraestructura y sustrajeron los equipos de radio comunicación de la garita de vigilancia.

Hoy se cumplen 29 días que las más de 5,000 personas residente en Cuajone –trabajadores y sus familiares– no cuentan con el servicio de agua potable por la toma de la válvula del reservorio de Viña Blanca por parte de los revoltosos. Y el desabastecimiento de agua afecta a todos los servicios, desde los comedores hasta el hospital de Cuajone, en el que se ha reportado un incremento de 50% en casos de enfermedades estomacales. Por supuesto, también las operaciones productivas de la mina están paralizadas desde el 28 de febrero, tanto por el desabastecimiento de agua como por el  bloqueo de la vía férrea, con todas las pérdidas económicas que esa paralización genera.

En un comunicado, la empresa Southern Peru, concesionaria de la mina, reiteró su llamado “a las autoridades del Estado, a la Defensoría del Pueblo y a todas las entidades competentes, para continuar con los esfuerzos de instalar un diálogo  constructivo y apegado a la legalidad, como único camino para la solución de este conflicto… Confirmamos nuestra total disposición a participar en la mesa de trabajo convocada por la PCM, la cual se instalaría en los siguientes días”. 

La conducta de estos sectores viola la Constitución y las leyes nacionales, y reproduce la estrategia de los grupos antimineros en otras áreas del corredor vial del sur. ¿Cuáles son las demandas planteadas por estos sectores violentistas a la mina Cuajone? El pago de US$ 5,000 millones y el 5% de las futuras utilidades. Estas demandas a Cuajone, por su carácter absurdo, se parecen a las exigencias que están haciendo algunos pobladores de Chumbivilcas y Espinar, dos provincias del Cusco, a la empresa concesionaria de Las Bambas. En ambos casos se exigen contratos de servicios utilizando la extorsión, y se hacen exigencias a las empresas que más bien correspondería hacérselas al Estado. 

Lo más grave de toda esta situación es que se produce en momentos en que el precio de la libra del cobre alcanza los US$ 4.50, un récord histórico. Este “superciclo”del cobre abre infinitas posibilidades para nuestro país, que es el segundo productor mundial de este metal (después de Chile); posibilidades de crecimiento económico, de convocatoria de inversiones, de generación de empleo y, sobre todo, de reducción de la pobreza. Sin embargo, estamos dejando pasar esa oportunidad porque nuestras principales minas productoras de cobre(como Cuajone y Las Bambas) están paralizadas por la acción de esos violentos grupos antimineros, y porque el Ejecutivo ha renunciado a imponer el principio de autoridad en el corredor vial del sur.

  • 27 de marzo del 2022

NOTICIAS RELACIONADAS >

Turismo en el Perú: reconocimientos y potencial de desarrollo

Editorial Economía

Turismo en el Perú: reconocimientos y potencial de desarrollo

  El turismo peruano vive un momento clave. En junio de 2025, Ol...

20 de agosto
La nueva ley de promoción agraria y el fin del Estado burocrático

Editorial Economía

La nueva ley de promoción agraria y el fin del Estado burocrático

  La aprobación de una nueva ley de promoción agra...

19 de agosto
La lección de Santa Rosa y la urgencia de un satélite peruano

Editorial Economía

La lección de Santa Rosa y la urgencia de un satélite peruano

El Perú enfrenta una decisión estratégica de larg...

19 de agosto

COMENTARIOS